Por qué el árbol se pone alto.

   Entonces, la madre tierra se dio la vuelta para su hijo, bisabuelo árbol y dice: "Árbol, tú eres el padrón verde vivo de la biosfera, tú das un lar para muchas criaturas del reino animal, tú das frutos y semillas. Solamente las nubes conocen el cielo mejor que tú".

   En su fuerte tronco está su poder. No apenas su tronco guarda la cuenta de la rueda del tiempo terrestre, mas él es como un eje que corre de mi polo magnético norte hasta mi polo magnético sur. Sus raíces abajo y las ramas encima muestran cómo mis dos polos trabajan para mí. Un polo recibe luz y radiación cósmica con sus ramas extendiéndose para el cielo. Mi otro polo libera todos mis mensajes de vida a través del interminable sistema de raíces del tiempo galáctico.

   "Árbol, tu tronco carga el conocimiento de todo lo que yo soy como una criatura del cosmos. Tú eres una imagen reflejada de mí misma. Nosotras somos ambas, endurecidas sobre un eje común girando en una rotación universal común".

   Sus raíces subterráneas reflejan sus ramas en el cielo. Del cielo cósmico llega toda la energía hasta sus ramas para alimentar la biosfera. De mi núcleo cósmico la energía del tiempo se irradia de vuelta a través de sus raíces pasando por su tronco.

   Árbol, solamente el tiempo puede sacarlo de sus raíces y libertarlo de vuelta a la calentadora tierra. En el final de mi tiempo del génesis, vendrá mi hijo más joven. En su juventud la criatura vendrá a conocerlo. "Tú le ayudarás y te ofrecerás a esa criatura". Pero la criatura se olvidará del tiempo. Olvidándose del tiempo, la criatura le arrancará y cortará de sus raíces todavía joven. "Cuando esto acontezca quédate firme. Si el olvido fuera muy grande, que mi hijo más joven no bien entienda que árbol y humanos tienen una raíz común en el tiempo, entonces tú debes estar listo para entregar tu mensaje de la tierra".

   El árbol permaneció noble y erecto, sus ramas se arquearon lindamente en unísono en dirección del gran cielo. Él sintió las palabras de la madre tierra desde sus raíces hasta la extremidad de su copa.

   Entonces del íntimo del eje invisible corriendo por el centro de su tronco el bisabuelo árbol creó su mensaje para la última generación de criatura de la tierra:

   Ultima generación de criatura de la tierra Yo soy tu guardián. Yo permanezco alto como tu  modelo. Si tú quieres ser como yo quédate quieto y conoce el anillo del tiempo. El anillo del tiempo. mi conocimiento es éste, en cuanto estoy quieto, yo todavía giro, lo que yo tejo, permanece en mi íntimo manteniéndome inmóvil  yo crezco alto, conservando energía, conociendo todo.

   En mi eje yo giro en el tiempo como la tierra a cada año un anillo a cada anillo un nacimiento.

   Criatura del futuro, criatura del tiempo. Tú puedes vivir en sus anillos. Tú puedes permanecer alto. Tú todavía puedes escalar por sus raíces en sueño terrestre para alcanzar sus ramas en el
cielo tan remoto, tan profundo, pregunte al árbol que permanece tan alto.

   El tiempo es su mente, el tiempo es todo, eleve sus ramas para el cielo, eleve sus sueños hasta donde ellas puedan volar

   La biosfera guarda un lugar para ti enraizado como un árbol en Hunab Ku.

 

   La tortuga y el árbol hablan del tiempo y de la mente

   La bisabuela Galaxia dice, tiempo y mente ustedes no pueden ver o saborear. La mente es la que conoce. Tiempo es el que fluye. Sin conocer su mente y sin estar en el tiempo su vida podría ser un terrible desperdicio: Mi nieta tierra conoce bien esto. Su elección de guardianes fue sabia. ¡Quién conoce mejor que la tortuga y el árbol que sólo existe el tiempo para ser!

   ¡Escucha de nuevo la historia de la tortuga y el árbol!

   Después que la madre tierra ha elegido los dos guardianes de dos reinos vivos de la biosfera, la tortuga salió de la corriente para descansar en la base circular y poderosa del alto tronco del árbol.

   Ambos, la tortuga y el árbol, sabían que tendrían que hacer un consejo. Ellos querían tener certeza de que sus señales eran correctas, exactas. Ellos querían especialmente saber que estaban juntos en el largo trayecto a ser recorrido.

   Estirando su sabia y vieja cabeza por fuera de su casco y mirando con admiración hacia lo alto, las ramas de los árboles extendiéndose enteramente para el cielo, la bisabuela, tortuga habló:
Vivir en el tiempo es una cosa árbol. Conocer el tiempo en que tú estás viviendo y todavía otra cosa que tú sabes.

   El bisabuelo árbol miró para abajo para la tortuga. Lo que yo sé mis anillos lo guardan escondido. Mas yo soy como tú tortuga. Guardando el tiempo dentro de mi tronco, manteniendo mi tronco inmóvil, el tiempo vive en mí y yo vivo mucho. Tú también tortuga. Muchos ciclos de trece lunas vienen y van. Muchos anillos expanden mi tronco, extienden mis raíces profundamente en el interior de la tierra y levantan mis ramas en lo alto del cielo. Viviendo tanto, resistiendo a muchos períodos de mudanzas, ¿Qué es que existe que yo no conozca? Como tú también tortuga, yo permanezco siempre verde.

   La tortuga respondió, yo comprendo, árbol. Como mi casco tu tronco es espiral. Por el centro de tu tronco que cuenta los años, hay algo que permanece inmutable, ¿Qué es?

El árbol respondió, mi naturaleza es inmóvil. Esa inmovilidad es el centro de mi tronco. Mi tronco es mi eje. Ese eje me mantiene recto, tú estás en lo cierto, tortuga, lo que es esa inmovilidad en mí.

   Una vez yo era una semilla, una nueva forma del tiempo fue soñada dentro de la semilla. Y de esa semilla yo crecí para la luz. Pero yo no puedo decirte si es eso lo que mantiene mi tronco recto y alto. ¿Será eso el sueño original del tiempo?

   La tortuga sonrió y dijo: mi naturaleza es constante. Yo surgí de un huevo. Una nueva forma del tiempo fue soñada dentro de ese huevo. De ese sueño me arrastré para afuera por el barro caliente. Mi casco me hizo fuerte y firme como tú. Yo me muevo lento cuando necesito. De cualquier manera, nadie puede moverse más rápido que el giro de un día. Entonces mi constante es suficiente para mí.

   No, apenas yo cargo a la naturaleza del tiempo en mis espaldas, pero nada en el tiempo puede impedir mis giros planetarios. Yo puedo comprender por qué la madre tierra nos apuntó como guardianes de la biosfera. En nuestras simples formas, nosotros podemos soportar casi todo. Nosotros somos silenciosos pero imbatibles. Yo creo que lo que mantiene su centro recto es nada más que la mente.

   El árbol respondió, tortuga, tú que eres tan sabia, cuéntame más. ¿Qué tú quieres decir con mente?

   La tortuga sonrió silenciosamente. Árbol, nadie sabe sobre la mente hasta que alguien llame la atención sobre ella. La mente es el centro inmóvil de Hunab Ku. Hunab Ku está en todo sueño de vida.

   Mente es lo que tú eres. Nadie puede tocarla o quitarla de ti. Nadie puede darte o decirte lo que ella es o no es. La mente es como el tiempo. No tiene sabor ni olor. Más o menos que sepas que tienes una mente, ¿Qué más puedes saber?

   Ahora el árbol sonrió. Yo comprendo tortuga. La mente está siempre sustentando mi centro. Yo he estado en mi mente todo el tiempo. O mi mente ha estado en mí. Es lo que me mantiene girando. Es el que produce el anillo del tiempo a cada trece lunas. Es el que yo cultivo de mi inmovilidad. Y cuanto más quieto me torno, más yo puedo hacer y ser.

   El árbol estaba triunfante, estirándose más alto que nunca, rozando las nubes en el cielo.

   La tortuga quedó inmóvil por un largo tiempo. Su cabeza en ristre en dirección al distante pináculo del árbol. Debajo de la espantosa altura del árbol, la tortuga sintióse pequeña. El árbol miró para abajo y habló suavemente en cuanto el viento gentilmente agitó su hermosa copa verde.